Aquí encontrarás notas y fotos de los viajes que he realizado a lo largo de mi vida.


31 de julio de 2007

Viajes a Tailandia. 1999 & 2002

Un lugar maravilloso, antiguo reino de Siam, con palacios de cuento de hadas, Budista en su mayoría, con gente maravillosa y lugares mágicos... Así es Tailandia.
Aquí un pequeño compendio de los tres viajes que hice por esta perla del Asia.
Mis viajes: Setiembre de 1999 con Malú y Marita, en Marzo del 2002 con Gladys y en Setiembre del 2002 con Katia.
En los dos primeros casos, nuestra primera parada fue en Hong Kong; más adelante escribiré sobre ese viaje.
La ruta más cómoda y barata fue: Lima-Miami-San Francisco-Hong Kong-Bangkok. En American Airlines y Cathay Pacific (Un lujo).
Bangkok, capital de Tailandia...ciudad de 10 millones de habitantes, donde puedes caminar tranquila a cualquier hora del día, con un tráfico de locos como en la mayoría de capitales asiáticas, con gente que va y viene en autos, motos y miles de tuk-tuks (moto-taxis para los peruanos): Aunque no es la manera más segura para trasladarte por Bangkok, debido al tráfico es la forma más rápida, barata, simple y más divertida (eso si tienes los huevos para soportar las velocidades extremas, las curvas peligrosas y la falta de seguridad en las pistas).

Colocar el mouse encima de cada foto para ver información sobre ella.


Tuk Tuk en Bangkok. Marita, Malú & yo
Como es costumbre el Lonely Planet, mi biblia de viajes, nos llevará por Tailandia; para mí es la mejor manera para viajar con total libertad, sin ataduras ni preocupaciones: vas a tu propio ritmo y entras y sales cuando te plazca.
Bangkok es una ciudad con tantas cosas interesantes que es imposible verla en unos pocos días; vale la pena caminarla, admirarla, pasarte solo un día entero en el Grand Palace o Palacio Real, antigua residencia del rey y una joya de la arquitectura oriental, con grandes jardines, esculturas al aire libre, techos dos aguas adornados con típicos adornos tailandeses. Al Palacio real vale la pena admirarlo de a pocos para que uno no se sienta embriagado por tanta belleza, tanta majestuosidad, es lindo esperar hasta la caída del sol, cuando hay menos turistas para sentir esa energía que emana de cada rincón de sus salones y jardines. Recomiendo que vayan temprano y se queden si es posible todo el día...pueden tomar fotos y fotos y fotos y no se cansarán de admirarlo (no se olviden que no pueden ir con shorts, ni polo sin mangas, ni con los pies desnudos: SÍ, hay que ponerse medias aunque hayan 1000 grados de calor).

Palacio Real, Bangkok Guardián del Palacio Real


















Estupa en Palacio Real, Bangkok Una de las tantas puertas del Palacio Real, Bangkok






















Otra parada obligatoria es el Wat Po uno de los templos más antiguos de Bangkok, data del siglo XVI, aunque fue reconstruído por Rama I en 1789. El Wat Po se encuentra a un paso del Palacio Real y ahí se encuentra el Buda echado, maravillosa y gigantesca estatua de ladrillo y argamasa cubiertos de pan de oro e incrustaciones de madreperla de 46 metros de longitud por 15 metros de altura y representa a Buda en el momento de su acceso al Nirvana o Iluminación.

Buda echado, Wat Po, Bangkok Buda de oro. Wat Po, Bangkok

Rostro del Buda echado, Wat Po, Bangkok

En el Wat Po se encuentra la escuela tradicional de masaje tailandés, considerada como una de las mejores del Asia. Ahí te dán masajes de media hora o de una hora, cosa que no te puedes perder; y si te animas y tienes el tiempo, puedes tomar un curso intensivo de un mes (http://www.watpomassage.com/).

Sukhothai, a 440Km. al norte de Bangkok, es considerada como la capital del primer reino independiente tailandés. Durante el siglo XIII aquí floreció una exuberante y creativa cultura basada en el budismo. Declarada por la UNESCO patrimonio mundial, la antigua Sukhothai es rica en ruinas de muchos templos de influencia Khmer, hindú, birmana y Mon.

Sukhothai, Uy! y ahora cómo me bajo Sukhothai, Buda





















Buda echado, Sukhothai

Ayutthayah, cuyo nombre completo significa "ciudad impenetrable", está ubicada a 80Km. al norte de Bangkok. Fue la capital del reino Siam durante 471 años desde 1350 hasta su destrucción en 1767 a mano de invasores Burmeses. Desde 1991, Ayuthaya es considerada patrimonio cultural mundial.

Ayutthayah, un lugar mágico para meditarRuinas del reino de Ayutthayah Ayutthayah. Gladys & yo












Ayutthayah

Chiang Mai, "Ciudad nueva" ubicada al norte de Tailandia. Es la ciudad más significativa culturalmente hablando. Hay mucha afluencia de turistas por la gran cantidad de actividades para hacer: Parque del elefante, visita a templos en lo alto de las montañas, visita a las tribus que habitan en las montañas como los Akha, Karen y Lisu, además de las compras en el famoso y gigantesco Night Bazaar, que empieza a funcionar a las 11pm y cierra a las 3am.

Templo Wat Chiang Mun, Chiang Mai Altar. Templo Wat Chiang Mun, Chiang Mai


















Centro cultural en Chiang Mai Templo Wat Phra That Doi Suthep, Chiang Mai























Chiang Rai, es la provincia más al norte de Tailandia y la puerta del "triángulo de oro" formado por Tailandia, Myanmar y Laos; ubicada a 785Km. al norte de Bangkok. Lo más bonito que se puede encontrar en esta provincia del norte son sus maravillosos paisajes que pueden ser recorridos en el lomo de un elefante. También se puede visitar el centro de rehabilitación de elefantes (en mi 2° viaje habían 22). Muy cerca se halla Mae Hong Son, considerada la provincia más remota del norte de Tailandia, frontera con Myanmar o Burma. Ha adquirido la influencia de las tribus montañesas y de la cultura birmana y thai. Hicimos una visita a la tribu Karen o de las mujeres "jirafa"; costumbres que se conservan no sé si por tradición o por simple atracción turística. Se puede visitar en un día.


Centro de rehabilitación de elefantes, Chiang Rai. BEBÉ

Centro de rehabilitación de elefantes, Chiang Rai. La mamá

Preparando a Lazami para el safari: unos platanitos para que no se canse
Safari en elefante por las montañas, Chiang Rai

Mujer tejedora, tribu Karen, Mae Hong Son

Tribu Karen, Mae Hong Son
Y al final como siempre....paraíso, playa, ocio, sol, mar, arena, masajes, chelas, hartas chelas (Singha porsupuesto). Pukhet y Kho Phi Phi para cerrar con broche de oro.

Kho Phi Phi Island...en medio del paraíso

Hotel en Pukhet...esto es vida!!!

26 de julio de 2007

Viaje a Santiago de Chile. Julio 2007

Este año he hecho un pequeño periplo por Sudamérica y no me puedo quejar, han sido experiencias muy bonitas y aunque muy distintas una de la otra, todas me han dejado una enseñanza. Primero fue Ecuador, luego Argentina y ahora Chile.
El objetivo de este viaje fue principalmente hacer yoga: Viajo una vez más con mi compañera inseparable de viajes y una amiga muy especial, Patic. Se nos presentó una súper oportunidad que no podíamos dejar pasar y la tomamos....cuando, por distintas circunstancias, cada una por separado tomó la decisión de terminar una etapa y empezar con una nueva, las cosas empezaron a darse sin que hiciéramos esfuerzo alguno. Todo está siendo puesto en el camino de una forma tan sorprendente, que a veces ya me parece de otro mundo y no le encontramos explicación (¿hay que hacerlo?). A medida que caminamos por este nuevo sendero de la vida, encontramos a gente increíble, oportunidades imperdibles llenas de enseñanzas y situaciones que me dejan boquiabierta; pero lo mejor de todo es que cada día estamos aprendiendo más.

Después de nuestro maravilloso viaje a Buenos Aires y de todo lo lindo que pasó por allá, nos embarcamos en esta nueva experiencia, que como dije en un post anterior, sabíamos iba a ser totalmente diferente a la experiencia con Marina, pero íbamos con las ganas de seguir aprendiendo, profundizando y entendiendo este camino del yoga que es parte de nuestra esencia, y de seguir conociéndonos interiormente.
Los preparativos al viaje estuvieron muy bien, siempre con la buena estrella que ilumina nuestro andar.
Mi trabajo me ocasionó un par de sustos que casi me infartan, pero así es la vida de las aeromoscas, así que buena cara y adelante; finalmente sabía que todo se iba a dar bien, como siempre.
Llegamos a Santiago tempranito en la mañana en vuelo de Lan con un frío bastante respetable, aunque siempre listas con las panties de lana para no agarrar un resfriado. Del aeropuerto tomamos un servicio de transporte llamado Transvip que nos llevo al B&B donde nos quedamos en Providencia por U$9 cada una (nada mal).
Nos pegamos una buena descansada y en la tarde nos fuimos a conocer Yogashala, el centro que habíamos escogido para practicar yoga. Qué puedo decir, el lugar es maravilloso, súper bien diseñado en una zona muy linda rodeada de nevados y muchos árboles. Aquí se puede practicar distintos tipos de yoga y hay una gran variedad de horarios, cursos y profesores y aparte hay seminarios internacionales todo el tiempo con la participación de profesores de distintas partes del mundo.

Colocar el mouse encima de cada foto para ver información sobre ella.

Patic en la entrada principal de Yogashala Símbolo de Yogashala en la puerta de entrada


Vista desde el salón Little BuddhaPasadizo que lleva a la puerta de entrada y vestíbulo Avenida Sánchez Fontecilla,Las Condes...Camino a Yogashala
Queremos sacarle el jugo a nuestra estadía en Yogashala, así que estamos haciendo, cada vez que se puede, dos clases diarias.
Tuvimos la oportunidad de practicar con más de un profesor y en niveles distintos; ésto tuvo sus lado favorable, y el otro lado también. Lo importante es que aprendemos, vemos lo bueno y lo malo, los aciertos y los errores y de todo eso nuestra experiencia va creciendo. Hemos conocido a gente súper bacán y eso es muy importante. Ha sido una experiencia que una vez más nos ha enriquecido mucho y hay que agradecer por esta oportunidad.
Pero como todo en la vida, tiene que haber variedad; así que también nos dimos nuestro tiempo para turistear un poco, para divertirnos y para hacer un poquito de locuras, como siempre (jeje!!).
Visitamos e hicimos de todo un poco: El Centro de la ciudad y su Plaza de Armas, El Cerro Santa Lucía, el barrio bohemio de Lastarria, El Cerro San Cristóbal desde donde se puede observar la alarmante contaminación en la que viven los habitantes de esta ciudad y claro, como las compras no podían faltar, fuimos a un par de malls a ver cositas (realmente a ver, porque Santiago está carísimo). En cuanto a la comida; ahora entiendo por qué los Chilenos nos copian todos nuestros platos y bebidas: La comida es terrible, se come muy mal y nos costó muchísimo encontrar un lugar rico para disfrutar. Una noche nos salimos de tres restaurantes porque no había variedad y una vez la comida nos cayó mal...tanto era el rollo que empezamos a buscar restaurantes peruanos para ir a comer; pero como somos buenas pobres, nos las ingeniamos con fruta, queso, pan, galletas, vino, pizza y logramos encontrar un par de restaurantes ricos.

Catedral de Santiago Plaza de Armas



Entrada al Cerro Santa Lucía Vista de Santiago y sus nevados desde el Cerro Santa Lucía

Paseo en teleférico, Cerro San Cristóbal No es niebla, es la alarmante vista de la contaminación de Santiago desde el Cerro San Cristóbal

Yoga en el Cerro Santa Lucía: Patic & yo en MalasanaPatic en Urdhva Dhanurasana



Yo en Virabhadrasana III Patic en Garudasana

Yo en Eka pada Koundinyasana ITomando un juguito en un sitio simpático de Santiago, con un cielo maravilloso atrás que parece un óleo


Gracias Santiago por acogernos, gracias a Polly, Emma y Ernesto por las clases; y gracias Dana por los consejos y recomendaciones.
Estos viajes son el principio de un largo camino, y ya se vislumbran otros más muy pronto....por ahora, nos estamos concentrando en nuestro tan ansiado viaje a la India que será el próximo setiembre. Soy muy afortunada, y gracias por eso.
Namaste.